09 agosto 2018

El período de adaptación

Dentro de nada empezamos en septiembre y quiero contaros qué es para mí el período de adaptación y cómo se lleva a cabo en conMimo.
Aclaremos primero el término. El período de adaptación es, en cuanto a escolaridad se refiere, el plazo que damos a los niños y a las familias para que conozcan y se familiaricen con el entorno, el grupo y las maestras o maestros. Esta escolaridad temprana para ser honestos, y haciendo una profunda reflexión, la hemos elegido e impuesto, en la mayoría de los casos, los adultos. Suele surgir de una necesidad, casi siempre laboral; la madre o el padre han agotado la baja maternal/paternal y necesitan reincorporarse a su puesto de trabajo.


¿Qué necesitan los niños en esta etapa?
Los niños de 0-3 años necesitan estar en contacto estrecho con la figura maternante o de apego. Necesitan sentirse seguros y necesitan tener cubiertas sus necesidades primarias para poder lanzarse a explorar e interactuar con su entorno. Por eso es tan importante hacer una buena adaptación, para asentar bien esos pilares y dar respuesta a esas necesidades psicoafectivas. Cuando los niños asimilen la nueva figura de apego y estén preparados para explorar su entorno sabremos que el niño está adaptado.

Y ¿cómo es la socialización en esta etapa?
En esta etapa el niño suele tener un juego individual, a veces paralelo; No será, en la mayoría de los  casos, un juego social y compartido hasta pasados los tres años. Eso no implica que no le gusten los otros niños, que no se fije en sus iguales, y que no aprendan de ellos, ¡claro que sí!
 Antes de socializar y compartir el juego, necesitan explorar y conquistar su propio cuerpo y su "yo" y no yo" bajo la figura segurizante en un ambiente hogareño y realizando tareas con sentido, tareas que tengan un principio y un fin, rutinas que le aporten seguridad y que ayudarán a que se desarrolle íntegramente.

¿En qué consiste entonces el período de adaptación?
El período de adaptación ha de ser con el niño o niña lo más suave y respetuoso  que podamos ofrecerles. Puede empezar a acudir a la casita con mamá o papá (o la persona que vaya a hacer la adaptación) a compartir un rato de juego, para ir ampliando paulatinamente ese tiempo; Y cuando se hayan creado vínculos y establecido confianza con la nueva persona adulta de referencia, cuando el niño se sienta a gusto en el nuevo entorno, sólo ahí, daremos el siguiente paso: el papá o mamá podrá marcharse a hacer, por ejemplo, un recado. A medida que el niño o niña se vaya sintiendo cómodo, y que vaya asimilando que papá o mamá vuelve siempre, el tiempo sin sus progenitores pasará a ser más largo en su ausencia.
Los niños, carecen de referencias espacio-temporales, por eso son tan importantes las rutinas, las actividades vienen integradas en una secuencia que siempre se repite.
Los ritmos ayudan a los niños y niñas a saber lo que viene después, y por tanto les aporta seguridad.


¿Cómo sabremos que están o no están adaptados?
  • Los niños que no están bien adaptados pueden pasar por varias fases:

*Fase en la que expresa su malestar: llorando, gritando, aferrándose a la figura maternante.
*Fase en la que ya no expresa, pero está muy lejos de estar adaptado. Ha llegado a la resignación.
*Fase en la somatiza ese malestar e inadaptabilidad. Se pone enfermo: vómitos, diarreas, virus...
*Fase en la que no expresa pero no interactua con el entorno, únicamente se dedica a esperar a que vuelvan.

  • Cuando llega la adaptación real, es cuando encuentran  la seguridad para interactuar con su entorno, cuando juegan, cuando ríen y cuando se encuentran como "en casa".


Creo que hay que dar la importancia que se merece a este período, es un período, que con suerte sólo habrá que hacerlo bien una vez en la vida. La duración dependerá de la maduración del niños y de la disponibilidad de las familias. No dudéis que en la casita conMimo os daremos el tiempo que  necesitéis.






















02 agosto 2018

Agua y arena.


Observando estos días en la playa a mis tres hijos, de edades diferentes: 4, 8 y 11 años, me doy cuenta de la importancia y de la riqueza de dos materiales tan sencillos que a la vez ofrecen tanto: la arena y el agua... Estos dos elementos que, a mi entender, no pueden, ni deben faltar en el entorno de los niños. Les permite experimentar con pesos, texturas; el comportamiento de la arena en contacto con el agua, el del agua a su vez con la arena, les ofrece oportunidades de juego libre y potencia su creatividad.
Pueden estar horas ensimismados, fluyendo con ellos: construyendo, destruyendo, creando infinidad de minimundos: castillos, túneles sin fin, montañas y volcanes, o simplemente, juegos de rol: cocinando tartas, flanes y comiditas… en definitiva, un sinfín de oportunidades.
Por eso en la casita conMimo próximamente no faltará un arenero y un mural de trasvases de agua en el jardín, para ofrecer a los niños un ambiente enriquecedor donde poder experimentar y jugar, en definitiva, APRENDER disfrutando.


10 julio 2018

Madre de Dia


Conmimo se transforma como la vida....comenzamos como un lugar de encuentro donde hablar de la crianza, el porteo, brindar la oportunidad de conocer el yoga embarazadas...y todo eso ha evolucionado.Con toda la emocion podemos decir que el nuevo proyecto comienza en SEPTIEMBRE!
 En breve daremos el enlace a la página web (está en proceso de construcción).
Mientras tanto, os resumo en qué consiste mi proyecto y la figura Madre de dia.

La figura "Madre de día"es una profesional titulada en el campo de la educación (magisterio, educación infantil, pedagogía) que adapta su vivienda para recibir y acompañar a un máximo de 4 niños de 0-3 años, en la primera etapa de infantil. Esta ratio tan pequeña permite ofrecer una atención individualizada a cada niño, adaptándose a la etapa evolutiva en la que está, permitiendo a los pequeños crecer sin prisas, respetando sus ritmos en un entorno seguro, cálido y perecido a su hogar bajo la mirada atenta de un profesional.  



Los niños, en consecuencia, enferman menos, precisamente por el respeto a sus ritmos y necesidades genuinas,  y por el número siempre muy inferior a la ratio de las guarderías convencionales. (Mi más sincero respeto por esta circunstancia, puesto que hay infinidad de maravillosas profesionales que se ven inmersas en estos ritmos, debido muchas veces a la  legislación  vigente).


Cuenta con el carnet de manipulador de alimentos, un seguro de responsabilidad civil y con un espacio adaptado para el desarrollo óptimo de los niños. 
Suele tener un jardín propio, espacio verde cercano, o parque donde poder salir con los niños diariamente. Pues es importante que salgan a diario, que estén en contacto con la naturaleza y que vivencien y experimenten con las estaciones y los regalos que ésta nos ofrece.

La casita conMimo brinda una ambiente familiar, tranquilo y amoroso, con materiales y estímulos adecuados a su momento evolutivo, que le brindarán experiencias enriquecedoras para poder desarrollarse a su ritmo, sin prisas.

Abierto el plazo de matrícula. Si quieres saber más, ponte en contacto conmigo: 
655 55 67 16.

 💚❤️ Eva 💜💛